Hoy te voy a explicar a leer las etiquetas de los alimentos envasados, pero debes saber que los mejores alimentos son los que no llevan etiqueta: carne, pescado, huevos, verdura, fruta, tubérculos…

Debes saber es que las etiquetas NO son iguales en todos los países, y que yo me centro en la normativa española, que es la misma que la del resto de países de la Unión Europea.

En primer lugar tienes que fijarte en la lista de ingredientes. Aquí van a aparecer enumerados todos los ingredientes utilizados para hacer el producto, en orden descendente según su cantidad. Es decir, aparecerá primero el ingrediente que esté en mayor cantidad en el producto, y el último el que esté en menor cantidad. Mi recomendación es que si esta lista es demasiado larga, o ves ingredientes poco saludables, lo descartes automáticamente. Por ejemplo azúcar/ dextrosa/ jarabe de glucosa, grasas parcial o totalmente hidrogenadas, demasiados colorantes o conservantes, polialcoholes en cantidad excesiva (maltitol es el más utilizado)…

Una vez has analizado los ingredientes, el producto tiene pocos y son saludables, tendrás que fijarte en el valor nutricional del producto (la tabla) para saber exactamente la cantidad que tiene de cada macronutriente. En ésta, la información viene dada por cada 100g o 100ml, y aparecen datos de:

-Valor energético (en KJ y Kcal)
-Grasas
       -De las cuáles saturadas
-Hidratos de carbono
       -De los cuáles azúcares
-Proteínas
-Sal

El valor energético son las kilocalorías que tiene el alimento por cada 100 gramos. No es ni mucho menos lo único que tienes que tener en cuenta, ya que un alimento puede ser saludable y tener muchas calorías, como por ejemplo los frutos secos naturales. 

En cuanto a las grasas, en general se divide en totales y saturadas, aunque a veces el desglose es más completo y aparecen las grasas trans. Las grasas no son malas, pero tenemos que ver de dónde vienen. Si estamos analizando por ejemplo un pan de molde, y en los ingredientes aparece aceite de girasol, la grasa provendrá de ahí, por lo que si tiene 10 g de grasa, ese pan no sería nada interesante.  

Siguiendo con los hidratos de carbono, aquí lo interesante es fijarse en el desglose de azúcares, ¡pero cuidado! Si en los ingredientes no aparece ningún tipo de azúcar (en ninguna de sus formas), entonces los azúcares están naturalmente presentes en el alimento, y no es azúcar añadido. 

Respecto a las proteínas, aquí de nuevo lo importante es la lista de ingredientes, ya que si estamos analizando por ejemplo un envase de jamón york, y vemos que solo tiene 12g de proteína por cada 100, es porque el porcentaje que lleva de jamón es bastante bajo, y eso tendría que venir reflejado en los ingredientes. 

Y por último la sal. La mayoría de los alimentos procesados son muy altos en sal (o sodio), por lo que habría que tener en cuenta que la cantidad máxima de sal diaria recomendada son 5g, entonces dependiendo de la cantidad que comamos de ese alimento, ver si seguiríamos dentro o nos pasaríamos. En el caso de una salsa por ejemplo, que tenga 1g de sal no es mucho, porque máximo nos pondremos 30g, por lo que serían 0,3g lo que estaríamos ingiriendo. En cambio para un gazpacho, 1g de sal sí sería mucho, ya que una ración son 150-200g, por lo que estaríamos tomando 1,5-2g de sal solamente con esto. 

A las chicas que trabajan conmigo, además de enseñarles a comer, también les doy información para que aprendan a leer la etiqueta de cada tipo de alimento. Además, si necesitan más ayuda, pueden enviarme etiquetas de productos y yo les digo si son aptos o no. Si quieres comenzar ya tu cambio y trabajar conmigo mano a mano, ¡ahora tengo plazas! Haz click aquí y empieza tu nuevo estilo de vida! 

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